Tatuajes en manos y pies

Autor desconocido

¡Vamos a hablar de tatuajes en dedos, palmas y talones!

Durante las últimas dos semanas he contestado explicando esto al menos a seis posibles clientes. ¡Este interés creciente se merece una entrada en el blog! 

Tu cuerpo esta cubierto de piel (obvio, y eso espero! :P) pero no todas las zonas tienen el mismo tipo. ¡Sólo compara tus párpados y tus codos...!

La tinta que el tatuador aplica bajo tu piel sigue siendo un líquido que es capaz de moverse y desarrollarse en función de lo que haga nuestra piel. No se parece en nada a pintar sobre un papel. Tu tatuaje continuará una evolución en la medida en la que el soporte en el que se encuentra (tu cuerpo) lo haga. 

Las zonas que sintamos elevadas o duras en nuestro tatuaje son debidas al tejido cicatrizal que se forma en cualquier herida. Puede ser más acusado, o menos. Según cómo reaccione la piel sobre la que trabajamos, según la técnica del artista y, para ser francos, a un porcentaje de ¡suerte!

Los que hayáis leído artículos sobre cómo se hace un buen tatuaje estaréis familiarizados con que la zona donde debe aplicarse la tinta es entre la dermis y epidermis:

Imagen original: White Ink Tattoos Center

En teoría, un tatuador cualificado tiene la destreza suficiente para realizar esta aplicación correctamente. Los problemas llegan cuando la parte del cuerpo dónde queremos tatuarnos tiene estas capas tan delgadas que es casi imposible hacerlo de manera uniforme y duradera. La cara, el cuello, las manos y los pies son un ejemplo de estas zonas conflictivas. 

Tatuar estas zonas requiere mucha habilidad. Si se aplica la tinta de manera demasiado superficial, esta desaparecerá cuando tu piel vaya regenerándose en su ciclo natural. Si por el contrario se aplica con demasiada profundidad, el tatuaje lucirá borroso y sin definición (parecido a trazo hecho con carboncillo). Y esto no ocurrirá recién hecho, sino cuando cure.

En Pinterest e Instagram podemos encontrar ejemplos maravillosos de tatuajes en estas zonas. Delicados, nítidos, definidos y... ¡¡¡RECIÉN HECHOS!!! (eso cuando no son montajes fotográficos incluso ¡calcomanías!)

Y para muestra un botón. Magnifico trabajo de Dr.Woo:

Cuando un tatuaje está recién hecho, lo que vemos son los finísimos canales que la aguja ha trazado rellenos de tinta. Imagínate el cauce de un río y el agua que lleva. Estás viendo directamente ese "agua" con todo su brillo y belleza. Para que la tinta quede encapsulada y la herida se cierre, tu cuerpo creará una capa de piel por encima de esta. Ya no verás el río en su esplendor, lo verás tapado por una malla translúcida. 

Otro riesgo (que es mucho menor en manos de un tatuador experimentado) son las expansiones de tinta. Cuando la aguja llega a la capa de grasa de la piel, la tinta corre sin control, provocando lo que llamamos "expansiones":

Imagen original: James Samaniego

Un efecto parecido al que se crea cuando un boli se destinta en un papel. Es decir: un borrón.

En una zona de piel tan fina, calcular la profundidad exacta es extremadamente difícil, por lo que un gran artista puede incurrir en cualquiera de estos "errores". 

Cuando pedís un tatuaje en manos/pies o uno con tinta blanca, tenéis en la cabeza estas fotografías de tatuajes recién hechos. No curados. Por no hablar del estado de excitación y emoción máxima que nos embarga una vez que tomamos la decisión de tatuarnos. Yo os explico todo esto pero sólo veo el frenesí en vuestros ojos y el pensamiento de "si, si! Acaba con este rollo y pínchame!" Es cuando cura cuando volvéis a un estado de serenidad y lógica. 

Otro añadido es que es difícil que estas zonas queden bien protegidas durante el inevitable tiempo de curación y ahí está la posibilidad de que se infecten. La higiene, el ritmo de vida, y desgraciadamente de nuevo la suerte del tatuado influye directamente en esto.

Este es el resultado (sin ponerme morbosa y utilizar imágenes realmente atroces que circulan por la red) más óptimo que probablemente consigas en un tatuaje técnicamente bien realizado una vez curado:

Instagram: @roxarosatattoos

Como profesional, hay ciertas zonas del cuerpo que no tatúo (es una elección personal): cara, cabeza y genitales (esto sería para desarrollar en otro artículo). Y durante mucho tiempo me he debatido entre incluir manos y pies en esta lista. Los motivos que me llevan a no hacerlo con las zonas de la primera lista son morales y personales. Con las manos y pies son únicamente motivos técnicos por todo lo explicado. Finalmente he decidido acceder a vuestras peticiones una vez estéis informados como dios manda. La única norma que se sale de los protocolos que sigo con el resto del cuerpo es que no incluyo repasos gratuitos cuando un tatuaje de menos de 6 meses lo necesita ¡¡¡ya que se positivamente que este tatuaje en manos/pies va a necesitarlo lo haga yo bien o no!!! 

Tu decides, yo ejecuto. Pero tú eres el único responsable de su mantenimiento o resultado final una vez informado.

Esta batería de preguntas te ayudarán a saber si realmente quieres ese tatuaje:

• Un tatuaje en estas zonas necesitará un repaso constante a lo largo de los años para no ser un borrón. ¿Tienes el tiempo, el dinero y las ganas para mantenerlo? 
• ¿Se te olvidarán las advertencias del tatuador cuando pase el tiempo y creas que tu tatuaje no se parece al que viste en Instagram (RECIÉN HECHO)?
• ¿Buscarás un culpable que pague por tus expectativas frustradas?
• Creerás que es tu derecho que el artista ponga de su bolsillo sus materiales y tiempo para repasar un trabajo que necesitó un repaso desde el mismo momento que concebiste la idea de realizarlo?
• En mi caso (y en el de muchos profesionales del sector), trabajo con una tarifa mínima. Al ser los tatuajes en los dedos normalmente muy pequeños (básicamente por no haber espacio) probablemente tu tatuaje sea o se acerque mucho a dicha tarifa. Cuando quieras repasarlo, pagarás el mismo precio por repasarlo que por hacértelo la primera vez ¿estarás en condiciones de comprenderlo?
• Es una de las zonas del cuerpo más dolorosas. Y si, la segunda vez te dolerá tanto como la primera...

Aquí tienes otro ejemplo de un tatuaje hecho por mi a una buena amiga, por lo que he tenido la oportunidad de hacer un seguimiento un año después.

Las fotos con fondo negro son las del tatuaje recién hecho y las que tienen plantas de fondo, las del tatuaje un año después. Podéis advertir el desgaste en la zona que ronda la palma, y eso que yo lo considero un éxito de curación teniendo en cuenta la zona!: 

Si después de leer cuidadosamente este articulo sigues convencido de seguir adelante 

¡estamos ansiosos por escuchar tus ideas! :D